¿Cómo evitar el aquaplaning de tu coche?
Si nos toca conducir en un día muy lluvioso, debemos estar preparados ante una situación de peligro como es el aquaplaning. Este fenómeno se produce por dos factores. El primero es el grosor de la película del agua que haya en la superficie por la que conducimos, y el segundo es la velocidad en la que conducimos. Tener en cuenta que a mayor velocidad o mayor grosor de película es más fácil que aparezca el aquaplaning.
Reconocer esta situación es bastante sencillo, notaremos la sensación de flotabilidad del eje delantero como si estuviéramos conduciendo sobre hielo y costará poco girar el coche o la pérdida de la dirección.
Para evitar caer en esta situación debemos observar atentamente la carretera por donde conducimos y evitar aceleraciones, frenazos y cambios bruscos de dirección. Te recomendamos conducir de forma suave y moderando la velocidad.
Si llega a ocurrir debes de tener en cuenta estas otras dos situaciones:
- Si te pasa en línea recta, no hagas nada con el volante, solo debes soltar el acelerador suavemente. Y cuando el coche disminuye la velocidad recuperará el control.
- Si te pasa en una curva, debes hacer lo mismo que en recta con el pedal del acelerador y mantener el volante girado lo justo para trazar la curva en la que estés. Nunca aceleres ni gires más hasta que recuperes el agarre.
Nunca frenes ante situación de aquaplaning. Piensa que cuando la rueda recupere el contacto con el asfalto, estará bloqueada y podrás perder fácilmente el control del vehículo.
Revisa periódicamente la presión de tus neumáticos y que está perfectamente alineado.
Aumenta la atención a la conducción, no te distraigas, no aumentes la velocidad y conduce a velocidad moderada y suave.